Grzegorz Kwiatkowski, de 39 años, poeta, académico y músico de rock, 🌛 camina por el bosque cercano al perímetro del campo de concentración de Stutthof, ahora sitio memorial en Sztutowo. Busca zapatos: 🌛 decenas, centenas, de todos los tamaños y colores. "Espero siempre no encontrar nada y que algún día...", dice, pero ese 🌛 no es el día.
Stutthof fue construido para perseguir a prisioneros políticos polacos 🌛 y se convirtió en una parte integral de la máquina de exterminio de judíos europeos. Después de la muerte de 🌛 sus dueños, los zapatos fueron reciclados en artículos de cuero como cinturones, mochilas y correajes.
Kwiatkowski ha 🌛 encontrado cientos de zapatos mientras hacía un documental sobre un luchador de la resistencia polaca y ahora promueve su mejor 🌛 preservación e investigación.
“Deben estar orgullosos de los zapatos como un homenaje a las víctimas. Son un símbolo de la verdad 🌛 que necesitamos recordar”, dice.